Os explicamos como obtener espectaculares resultados en la piel del rostro y escote utilizando productos de cosmética natural.
Cada estación tiene sus peculiaridades y en invierno la forma de tratar el rostros difiere de los consejos útiles que os dimos respecto al verano.
En esta época son diversos factores los que actúan sobre la piel, por un lado el clima frío, con los contrastes de temperatura bruscos cada vez que entramos en lugares con calefacción o salimos a la calle. La deshidratación se acelera, debido a estos cambios y al uso de calefacciones, el riego sanguíneo se ve afectado igualmente por el contraste frío-calor, lo que favorece rojeces y reacciones indeseadas sobre la piel más expuesta, la del rostro.
Hemos adaptado la técnica facial Coreana al uso de cosmética natural, para que consigas una piel radiante y favorezcas la óptima absorción de cada producto utilizado, manos a la obra:
Es importante conocer que pasos se deben de seguir, y sobre todo, en que orden se deben de utilizar los cosméticos naturales para la preparación de la piel, la apertura de los poros y la aplicación de los productos, el orden determinado es debido a optimizar la absorción en función a su densidad molecular de cremas, serums y aceites naturales, por ello empezamos con los productos más ligeros, aumentando progresivamente la densidad de los siguientes, creando una serie de capas que no impiden la absorción de los siguientes productos aplicados y va sellando la evaporación de los menos densos, haciendo que permanezcan más tiempo sobre la piel, alargando los tiempos de absorción y aprovechamiento.
1º Paso: Preparación de la piel
Lo primero que haremos será limpiar el rostro con agua tibia, el agua fría cierra los poros, lo que dificulta tanto la limpieza como la posterior absorción de los productos, el agua demasiado caliente favorece la flacidez, por ello lo ideal es lavar la cara con agua tibia, dejándola limpia y con los poros abiertos para continuar con la rutina. No es necesario secar la piel, déjala húmeda para seguir con la rutina de limpieza.
2º Paso: Limpieza más profunda
Lo ideal es utilizar uno de los jabones naturales, el más indicado para tu tipo de piel (caléndula para piel sensible, árbol del té para piel con tendencia al acné, de arcilla verde para piel grasa, de rosa mosqueta para piel seca…). Con las manos mojadas sobamos el jabón, y una vez impregnadas las manos en el mismo, hacemos una limpieza facial, se recomienda hacer círculos “orejas-boca-nariz-frente” para favorecer la circulación facial, pero de forma suave. Aclara el jabón y secar con suaves toques, nunca frotando.
3º Paso: Exfoliación.
Una vez por semana conviene realizar una exfoliación, para ello son ideales los discos faciales de fibra de luffa, haciendo círculos igual que hemos explicado para el jabonado, procedemos a exfoliar de forma suave, se trata de retirar las células muertas, pero sin agredir la piel, por ello es importante no frotar en exceso ni abusar de la exfoliación. Realiza una suave exfoliación en círculos para favorecer la circulación.
4º Paso: Tónico
Son muchos los tónicos que se encuentran en el mercado, pero no es necesario gastar dinero en uno, como buenos amantes de lo natural que somos os recomendamos hacer un facilísimo tónico casero que calma la piel tras la limpieza y exfoliación, para ello solo es necesario hacer una infusión de dos bolsas de manzanilla en medio vado de agua y utilizar frío sobre el rostro, aplicando bien con pequeños toques con un algodón.
5º Paso: Sérum
Llegados a este punto, la piel se encuentra en condiciones óptimas para absorber el sérum, este contribuye a mantener la piel más elástica, luminosa y con aspecto radiante y descansado. También se pueden utilizar en este paso una gotas de colágeno marino, lo que favorece la generación de colágeno y por ello, mantiene la piel más elástica y flexible.
6º Paso – Aceites
Es el momento de aplicar unas pocas gotas del aceite indicado al tipo de piel (rosa mosqueta para pieles secas, argán para pieles mixtas, germen de trigo rico en antioxidantes, vitamina E…, caléndula y manzanilla para pieles sensibles…) ayudarán a conseguir la hidratación y nutrición ideal.
7º Paso:Crema facial
Una vez realizados todos los pasos anteriores, aplicamos una pequeña cantidad de una buena crema facial, en nuestro caso ofrecemos dos opciones, la crema facial biointensiva, ideal para piel normal y sensible, o la reafirmante, para piel seca o piel madura. Además de sus principios activos que benefician la piel están elaboradas con una base de aloe de vera ecológico que actúa como sellador final, creando una fina capa que evita que la piel se deshidrate y actúa de barrera para las inclemencias y cambios de temperatura, encapsulando los tratamientos anteriores y alargando su tiempo de absorción, lo que los hace más efectivos.
Recuerda, es importante utilizar los productos de cósmetica natural en un órden determinado para impedir que una mala aplicación impida la absorción del producto utilizado encima.