Quizás ya te has dado cuenta de que en el mundo de la cosmética sostenible no paramos de inventar palabras nuevas que, muchas veces, más que aclararnos nos lían mucho más. Muchos de los términos que usamos en el sector no terminan de quedar claros y no llegamos a saber ni a entender lo que son. Es por eso que hemos venido a ayudaros a salir de dudas y aportar un poco de luz ante tanto término moderno.
ZERO WASTE
Pueden tratarse de productos que no generan residuos en cuanto a su fabricación, su uso y su vida útil. Es un paso más al del reciclaje, dejando atrás el concepto de usar y tirar, y dándole un nuevo valor a la palabra: reutilizar. Se genera menos basura y el impacto ambiental será menor. El ejemplo más claro de cosmética zero waste son los cosméticos sólidos: champús, jabones…
También podemos unirnos como consumidoras a esta filosofía. Solo requiere un cambio de mentalidad a la hora de comprar productos que se puedan reutilizar. Cada vez más empresas creamos productos así: discos desmaquillantes de algodón, la copa menstrual, esponjas marinas, esponjas de luffa… Se trata de fijarnos más en lo que compramos y tratar de que sea reutilizable.
CRUELTY FREE
Significa que no se experimenta ni testa con animales con fines cosméticos en ninguna fase de la elaboración de los productos. El término nos posiciona en contra de la experimentación animal.
Para identificar un producto en el que no se ha testeado en animales debemos buscar en el envase algún sello que acredite que son “cruelty free” reconocidos internacionalmente como son: PETA, Leapping Bunny y Choose Cruelty Free.
De todos modos, no es un término muy distintivo a nivel europeo ya que en Europa se prohibió la experimentación animal en productos cosméticos, a partir del 2013.Por lo que podemos afirmar que todos los productos cosméticos son “cruelty free” tengan o no sello en Europa.
Ojo, volvemos a repetir que es a nivel europeo y solo en cosmética porque, por ejemplo, en China se exige que el producto sea testado en animales y hay otras industrias como la de productos de limpieza que esta regularización no se aplica. En nuestro caso nos posicionamos como Cruelty Free para todo el mundo.
ECO-FRIENDLY
Significa que es cosmética sostenible respetuoso con el medio ambiente (libre de tóxicos, biodegradable, ecológico…). Importa mucho la composición y el origen de los ingredientes de la cosmética eco-friendly.
Los ingredientes son orgánicos y sus fórmulas no contienen ninguno de los tóxicos que debemos evitar en nuestra cosmética como los sulfatos, las siliconas y los parabenos, por lo que no es dañina para el cuerpo, ni para el medio ambiente.
Y desde luego que si quieres conocer productos que respetan tanto la piel como la naturaleza, estás en el lugar indicado: conoce nuestros packs para alcanzar una belleza eco-friendly.
TOXIC FREE
Cosmética que no contiene ni ingredientes ni componentes tóxicos que dañen ni nuestra salud ni la del medio ambiente. Aunque ocurre lo mismo que con el tema de experimentar en animales: la Unión Europea legisló una ley que prohíbe 1.328 compuestos en cosmética.
Además, anualmente se actualizan mucho los listados de sustancias prohibidas y restringidas. Así que por lo que sabemos todos los cosméticos que han sido registrados como tal y se comercializan en la UE, son seguros. Otra cosa es que se eviten ingredientes sintéticos y se opte por ingredientes naturales que siempre serán mejor asimilados por nuestra piel.
COSMÉTICA “CLEAN”
Significa libre de sustancias químicas, aunque no necesariamente implica que todos los ingredientes utilizados sean naturales. Por ejemplo, su formulación puede incluir perfumes, pero siempre libre de alérgenos. Prima hermana de la cosmética “toxic free” y la cosmética sostenible.
SLOW BEAUTY
Una filosofía que no solo va de usar cosmética sostenible y natural sino de retomar el contacto con nosotros mismos con nuestras rutinas de belleza disfrutando de ese momento que dedicamos a cuidarnos. Este concepto propone un cambio de actitud en la búsqueda de la belleza, basada en el bienestar conectando con uno mismo y con el medio ambiente. Esta cosmética pretende despertar los sentidos y que te dediques un tiempo para ti y tu ritual de belleza.
WELL-AGING
Esta otra filosofía busca preservar la belleza de cada persona con la máxima naturalidad. No hay que luchar contra el paso del tiempo, debemos aceptar el paso de la edad e ir envejeciendo con naturalidad cuidándonos y sintiéndonos a gusto en cada una de nuestras etapas. El papel de la cosmética en esta filosofía es clave para aceptar que no existen los productos milagro, pero que sí existen los productos que te harán estar en bienestar con tu piel cuando la cuidamos, la dedicamos tiempo y lo más importante, nos escuchamos.
Si os sentís identificadas con esta filosofía, hemos creado un ebook con el que averiguarás cuál es tu tipo de piel y qué cosméticos necesita para alcanzar el máximo bienestar en ella.