¿Has oído hablar de la doble limpieza facial? Son unos términos que están de moda y que cambiarán tu rutina de limpieza para siempre.
Esta técnica ha llegado desde Corea y es muy reconocida porque sus resultados son muy efectivos. Si aún no has aplicado esta técnica o no sabes lo que es, te estás perdiendo una de las mejores técnicas de belleza para lograr una piel luminosa, con una mejor textura y sin imperfecciones.
¿En qué consiste la doble limpieza facial?
Se trata de una técnica de dos pasos para limpiar la piel del rostro en profundidad. Se aplicarán dos o tres tipos de limpiadores, uno de formato en aceite o bálsamo, el segundo una mousse o gel limpiador con base acuosa y el tercero un producto que limpie los restos y tonifique.
Resulta que una sola limpieza no elimina todos los residuos de la piel que se acumulan durante el día. Además de limpiar, también beneficia a la piel: previene las imperfecciones, mejora su textura y revela una tez más brillante y saludable.
¿Cómo realizar la doble limpieza facial?
Debes dedicar al menos 5 minutos por la noche para limpiarte el rostro: quitaremos los restos de maquillaje, la polución y el resto de las cremas de día.
🛁1- Usa un producto oleoso por todo el rostro para eliminar el maquillaje. Incide sobre todo en la zona de los labios y los ojos. Después aclara con agua tibia y seca.
🛁2- Usa un jabón limpiador jabonoso que no sea agresivo con tu piel para eliminar el resto de impurezas que quedan.
🛁3- Finaliza con unas gotas de agua micelar por el rostro y retira con un disco, verás que todavía quedaban restos. Después del agua micelar, no es necesario aclarar con agua.
¡Tu piel estará lista para aplicar tus cremas y sérums nocturnos! ¡Con la piel así, estos tratamientos serán muchísimo más eficaces ya que facilita la penetración en la piel!
¿Qué productos usar para aplicar la doble limpieza según mi piel?
Para el primer paso recomendaremos aceites naturales afines con nuestro tipo de piel, donde los beneficios serán múltiples al ser naturales.
Para el segundo paso, aconsejaremos limpiadores faciales syndet, formulados de manera que tienen un pH más afín al de la piel por lo que son menos agresivos y más aptos para la limpieza de nuestro rostro.
Y para el tercer y último paso recomendaremos nuestro agua micelar, también realizada con ingredientes 100% naturales y que limpia a la vez que trata la piel. ¡Además, no necesita aclarado!
Si aún no sabes cuál es tu tipo de piel, te recomendamos realizar nuestro test, para que puedas acertar con los productos según las necesidades de tu piel. ¡HAZ EL TEST!
Doble Limpieza para pieles grasas y con acné
Paso 1: Aceite de jojoba
Perfecto para usar con las pieles grasas ya que es el más similar al aceite de la piel humana (sebo), por lo que se absorbe fácilmente sin hacer que la piel se sienta grasienta o pegajosa ni obstruir los poros.
Paso 2: Limpiador Facial Equilibrante
Regula la secreción sebácea y calma la piel respetando el manto lipídico de la piel para evitar agredirla con el uso frecuente.
Paso 3: Agua Micelar
Con propiedades hidratantes y calmantes, es un todo terreno: limpia, desmaquilla, hidrata y calma tu piel.
Doble Limpieza para pieles mixtas y normales
Paso 1: Aceite de almendras dulces
¡Uno de los aceites más famosos debido a su alta capacidad hidratante!
Paso 2: Limpiador Facial Nutritivo
Limpia, regenera y nutre respetando el manto lipídico de la piel para evitar agredirla con el uso frecuente.
Paso 3: Agua Micelar
Con propiedades hidratantes y calmantes, es un todo terreno: limpia, desmaquilla, hidrata y calma tu piel.
Doble limpieza para pieles secas y sensibles
Paso 1: Aceite de Ricino
Se trata de un potente regenerador que deja la piel suave y es adecuado para combatir escamas, manchas de piel y dermatitis
Paso 2: Limpiador Facial Calmante
Limpia, hidrata y calma respetando el manto lipídico de la piel para evitar agredirla con el uso frecuente.
Paso 3: Agua Micelar
Con propiedades hidratantes y calmantes, es un todo terreno: limpia, desmaquilla, hidrata y calma tu piel.